Lo de María Elena Villamil es de mirar con calma. 

Con Límites indefinidos María Elena Villamil inaugura oficialmente la Semana de la Moda de Colombia en su edición número 34 y celebra, además, los 35 años de INEXMODA, el instituto que hace posible la feria. 

Una celebración por lo alto que nos reconfirma la conexión natural que tiene Villamil con el arte y su majestuosa forma de combinarlo con la moda, para así, crear piezas de colección. Esta vez la conexión fue más evidente, su pasarela era un lienzo en blanco listo para teñirse de rojos, marrones, naranjas, verdes y negros. Desde su puesta en escena con jarrones y vasijas, tomados por dos artistas que pintaron el lienzo con sus movimientos, hasta su reinterpretación del expresionismo abstracto, el hilo conductor de esta colección, plasmado en camisas sobredimensionadas, chaquetas irregulares, maxi vestidos y maxi faldas, pantalones y vestidos cortos.

Las estructuras ya características de María Elena y su ADN arquitectónico, se transformaron con los estampados abstractos y con las explosiones de color que buscan generar sensaciones y vincularse a los estados de ánimo, buscando la reflexión, la dopamina y la plenitud. Una colección que emocionó de principio y a fin.